27 diciembre 2007

Fármaco muestra buenos resultados en control de atracones

26 de diciembre de 2007
Por Anthony J. Brown

NUEVA YORK (Reuters Health) - Los resultados de un estudio pequeño sugieren que el relajante muscular llamado baclofeno reduciría los atracones compulsivos en mujeres con bulimia nerviosa y trastorno por atracones.

"Este es el primer estudio sobre el uso sistemático de baclofeno en pacientes con trastorno por atracones y bulimia nerviosa", dijo a Reuters Health la doctora Allegra I. Broft, de la Columbia University, quien dirigió el estudio.

El medicamento ya demostró mantener a los alcohólicos alejados de la bebida de manera segura y efectiva.

"Nos interesó este fármaco por su posible papel en el tratamiento del abuso de drogas; lo elegimos desde la hipótesis de que los trastornos por atracones compulsivos y el abuso de drogas tendrían orígenes comunes y que el medicamento que sirve para uno serviría para tratar el resto", explicó Broft.

El estudio, publicado en International Journal of Eating Disorders, incluyó a cuatro mujeres con bulimia nerviosa y trastorno por atracones y a tres con bulimia, a las que se trató con una dosis de 60 miligramos de baclofeno por día.

Seis mujeres completaron las 10 semanas de estudio.

En tres participantes con trastorno por atracones y en dos con bulimia se observó una reducción del 50 por ciento o más de la frecuencia de los atracones compulsivos durante el ensayo. Dos pacientes con trastorno por atracones y una con bulimia ya no se daban atracones a la décima semana.

Las participantes toleraron bien el baclofeno; cuatro mujeres siguieron tomándolo después de finalizar el estudio.

"El baclofeno sería útil para tratar enfermedades como el trastorno por atracones y la bulimia nerviosa, pero se necesitan estudios más grandes y definitivos", concluyó Broft.

FUENTE: International Journal of Eating Disorders, diciembre del 2007

06 diciembre 2007

Escuela para familiares.

Granada albergará la primera escuela dirigida a familiares de afectados por trastornos alimenticios, como la anorexia o la bulimia, para informar y asesorar a los padres y contribuir a que éstos se conviertan en una pieza clave para la recuperación de sus hijos.

El Instituto Andaluz de la Juventud (IAJ) y la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa y la Bulimia de Granada (Adaner) han organizado dicha escuela, que comenzará a funcionar este fin de semana en el Albergue Juvenil de Víznar, con la participación de 30 familiares.

El coordinador en Granada del IAJ, Higinio Almagro, avanzó que la escuela también contará con la participación de una joven que sufrió trastornos para contar cómo ve a los padres en una situación así.

La escuela contará con talleres de información, nutrición, relajación o habilidades sociales, además de actividades deportivas, didácticas y de naturaleza, según especificó Almagro, quien manifestó su deseo de que se convierta en referente y modelo para otras provincias, al igual que ocurrió con los campamentos terapéuticos.

El presidente de Adaner, Eduardo Oblaré, destacó que la escuela surge ante "la ansiedad, falta de información y desorientación de los padres" cuando acuden a la asociación.

Efe / GRANADA

02 diciembre 2007

Un escáner para detectar la anorexia.

20MINUTOS.ES. 02.12.2007 - 13:15h

* Un estudio analizó los casos de 13 mujeres saludables y 13 que se encontraban recuperándose de la enfermedad.
* Revela que los desórdenes alimenticios están relacionados con "patrones que se producen durante la actividad cerebral".


La anorexia es una enfermedad que afecta a una de cada cien mujeres de entre 15 y 30 años. Ahora, un sofisticado escáner ha revelado que los desórdenes alimenticios están relacionados con "patrones que se producen durante la actividad cerebral".

Los resultados de este estudio, realizado por la Universidad de Pittburgh, ha demostrado que incluso durante el proceso de recuperación de algunas mujeres jóvenes tuvieron una actividad cerebral "enormemente diferente", a pesar de mantenerse en un peso normal durante más de un año, según informa BBC.

Y es que según han descubierto, una región del cerebro vinculada a la ansiedad y el perfeccionismo es la causante de que muchas mujeres decidan no ingerir alimentos para tratar de encontrar su peso ideal. El estudio analizó los casos de 13 mujeres saludables y 13 que se encontraban recuperándose de la enfermedad.

Metodología

El método fue simple: se les pidió que participaran en un videojuego, en el que las respuestas correctas serían premiadas económicamente. Así, los investigadores analizaron sistemáticamente lo que se les pasaba por la cabeza mediante dicho escáner, que han bautizado como "Imaginología por resonancia magnética funcional".

De esta manera, observaron "notables diferencias" entre las mujeres saludables al ganar y al perder y las que presentaban un historial de anorexia, quienes manifestaron una pequeña diferencia, lo que indicó que éstas difícilmente aprecian placer inmediato "si no se siente mucha diferencia de una experiencia negativa".

30 noviembre 2007

Papá sobreprotector, riesgo de hija anoréxica.

Casi como si se tratara de una regla matemática, investigadores australianos determinaron que la relación de un padre con su hija tendría una alta influencia en el desarrollo o no de un trastorno alimentario por parte de la menor.

Las hijas de padres muy controladores eran más propensas a padecer anorexia nerviosa, mientras que aquellas que recibían poca atención de sus papás tenían más riesgo de desarrollar tanto anorexia como bulimia, pero en menor grado, halló el equipo dirigido por la doctora Tracey D. Wade, de la Flinders University, en Adelaida.

Por otra parte, las expectativas paternas excesivas, que suelen considerarse un factor de riesgo de la anorexia, no aparecieron asociadas con el trastorno alimentario en el estudio.

Sin embargo, el equipo halló que sí predisponían a las niñas a desarrollar bulimia. Estos resultados fueron publicados en International Journal of Eating Disorders. Las críticas familiares de la apariencia de los chicos, su peso y conductas alimentarias se relacionaron con los desórdenes de la alimentación.

Para comprender mejor el papel de esas críticas y otras facetas de la paternidad en el desarrollo de estas enfermedades, el equipo de Wade observó a 622 gemelas, incluidas 226 pares y 170 individuales.

En un análisis, el equipo comparó las experiencias de vida tempranas de gemelas individuales con depresión, anorexia nerviosa o bulimia, con las de gemelas sin trastornos psiquiátricos.

En el segundo estudio, analizó pares de gemelas en los que sólo una tenía un trastorno alimentario o depresión grave. Los investigadores hallaron una relación entre la aparición de la anorexia o la bulimia con comentarios de integrantes de las familias sobre cuánto comía una niña o su apariencia.

Tanto las participantes deprimidas y aquellas con bulimia mencionaban expectativas de los padres más altas que las mujeres mentalmente sanas; la relación con la bulimia era la más alta.

Tanto el conflicto con los padres como su crítica favorecían la aparición de los trastornos alimentarios y la depresión. Las gemelas con anorexia eran más propensas a tener padres sobreprotectores y controladores.

"Los padres tendrían un papel único en la alteración de la conducta alimentaria de sus hijas, si se la compara con otras psicopatologías", concluyeron los autores.

Los resultados podrían ayudar a trabajar con las "vulnerabilidades y las creencias" del tratamiento de los trastornos alimentarios, opinó el equipo.

"Por ejemplo, cuando se trabaja con personas con anorexia habría que eliminar la sensación de control por otros más poderosos, mientras que con los pacientes con bulimia habría que analizar la necesidad de satisfacer las expectativas de los demás", sugirieron los autores.

Fuente: Reuters

29 noviembre 2007

La hospitalización domiciliaria cura el 80% de la anorexia.

Una combinación de factores neurobiológicos y exógenos y antecedentes familiares de trastorno mental puede desencadenar la anorexia nerviosa. Cuando la familia se implica en el tratamiento, la tasa de éxito alcanza hasta un 80 por ciento de los casos.
S. Moreno 28/11/2007

La familia ha pasado de considerarse responsable de la enfermedad mental a ser una pieza clave en el tratamiento de muchas de estas patologías. Tradicionalmente se explicaban las enfermedades psiquiátricas de los hijos por los atributos de los padres. Como enumera el pediatra de origen argentino Tomás Silber, "se pensaba que la esquizofrenia aparecía por madres esquizofrenizantes o que el autismo se producía por padres fríos y distantes. Sin embargo, ahora conocemos la base biológica de estas enfermedades y ocurre lo mismo con los trastornos de la alimentación". Silber dirige la Unidad de Medicina del Adolescente y es profesor de Pediatría en la Universidad George Washington, en Washington, y ha participado en las XI Jornadas de Trastornos del Comportamiento Alimentario, organizadas por el Hospital Universitario Niño Jesús, de Madrid, que terminaron ayer.

"Hay pruebas recientes que indican la existencia de una diátesis cerebral o predisposición a padecer la anorexia nerviosa, y que el factor desencadenante es hacer dieta". Si las niñas con esta diátesis cerebral no hicieran régimen, los rasgos que las caracterizan podrían pasar desapercibidos: perfeccionismo; afán por la simetría y el orden; rigidez para abandonar ciertas conductas; resistencia al cambio, y rechazo al riesgo. Son peculiaridades que están inmersas en una sociedad de culto al cuerpo, con un nivel de exigencia muy elevado: demasiado para personas tan perfeccionistas.

El tratamiento de la anorexia ha experimentado en los últimos años un cambio de enfoque "gracias a que se ha adelantado el diagnóstico", ha matizado Gonzalo Morandé, jefe de la Sección de Psiquiatría y Psicología del Hospital Infantil Niño Jesús, y organizador de las jornadas. Así, es posible poner en práctica las pautas propuestas por los especialistas del Hospital Maudsley, en Reino Unido, conocido ya como modelo Maudsley de tratamiento de la anorexia, y que se basa en la integración de la familia en el abordaje de la enfermedad por medio de la hospitalización en casa.

Compromiso paterno
"Lo que se busca es un compromiso de los padres en el tratamiento de la enfermedad de sus hijas. Si en el hospital son las enfermeras las que se ocupan de que la paciente coma, con este modelo son los padres los responsables", explica Silber, que coincide con Morandé en los buenos resultados de esta estrategia terapéutica.

"Según nuestra experiencia, se puede alcanzar una tasa de éxito en el 80 por ciento de los casos. Eso sí, tienen que estar bien seleccionados: debe ser el primer episodio de enfermedad (la hospitalización domiciliaria no sirve en las recaídas); funciona mejor en pacientes más jóvenes (menos de 15 años); no debe existir peligro para su vida, y los padres tienen que comprender el programa y comprometerse con él". El ingreso hospitalario queda para los casos más extremos y las recaídas.

¿Es aplicable este tratamiento en una familia desestructurada? Según Silber, "la participación de la familia no consiste necesariamente en la acción del padre y de la madre: pueden ser otros dos adultos los que colaboren, como una tía y un hermano mayor". Lo más difícil es convencer a los padres: "Hay que recordarles los logros de su vida para transmitirles que también pueden cuidar a sus hijas ahora". Silber reconoce que una de las gratificaciones de su trabajo ocurre cuando una antigua paciente le llama para contarle que ha sido madre; entonces sabe que ya ha superado el miedo al cambio.

Precoces, alarmados, obesos
La edad de aparición de la anorexia ha bajado hasta el punto de que existen pacientes con ocho o nueve años. Un reciente estudio sobre la percepción que las niñas tienen de su propio cuerpo indicaba que a los diez años el rasgo más importante no es la cara sino el tipo. La parte positiva de esta tendencia a la precocidad es que ahora la anorexia se detecta antes. "Hace años llegaban casos muy graves, cuando ya había transcurrido un año de enfermedad; ahora vivimos la situación opuesta: en cuanto los padres tienen una sospecha acuden al médico y muchas veces el temor es infundado", aclara Tomás Silber. Sin embargo, este estado de alerta que ya ha asimilado la sociedad ante la anorexia aún no ha calado con otros trastornos, como la obesidad. Morandé razona que cada vez hay más niños obesos y pese a la alarma sanitaria no se observa aún una preocupación proporcional en los padres.

24 noviembre 2007

«Nos es más fácil identificar nuestros defectos que nuestras virtudes»

«Los enfermos de anorexia y bulimia viven en un secreto, en una burbuja»

La psicóloga clínica que intervino ayer en las Jornadas sobre trastornos de la alimentación es hija del famoso Luis Rojas Marcos, un destacado psiquiatra español que trabaja en Nueva York. Precisamente es la ciudad natal de Laura y su casa durante 23 años. Vivió en primera persona los atentados de las Torres Gemelas y ayudó como voluntaria en el 11-S, poco antes de recalar en España, donde actualmente ha decidido instalarse por su cuenta. Laura Rojas Marcos reconoce la influencia de su padre en su carrera profesional.

CARLOS GIL. - Los más conocidos son la anorexia y la bulimia, pero ¿hay más trastornos alimentarios?
- Hay dos últimos que están adquiriendo cada vez mayor importancia: vigorexia y ortorexia, que en nuestra sociedad actual se ha diagnosticado desde hace pocos años. La personas que sufren vigorexia tienen una obsesión por la musculación, van al gimnasio día y noche, se machacan y toman a lo mejor hormonas en un momento dado. Las que sufren ortorexia son todas aquellas personas obsesionadas por la comida sana, las calorías, e incluso llegan a sufrir fobias de algunos alimentos, como el chocolate, las mantequillas, y lo evitan hasta tal punto que toda su vida está controlada por esas obsesiones, fobias, miedos y ansiedades.

- ¿Cómo se producen los trastornos alimentarios?
- La ansiedad es una emoción que sufrimos todos en algún momento de nuestra vida, a veces con picos muy agudos cuando lo pasamos mal. Todos sufrimos un nivel de estrés que forma parte de la vida diaria. El miedo es un mecanismo de defensa para ayudarnos a sobrevivir, pero cuando se agudiza en situaciones que no están relacionadas con una amenaza, como puede ser tener miedo a la comida, tenerle pavor a engordar, aparece el sufrimiento, la depresión, hay un desequilibrio que sufren estas personas con trastornos de ansiedad. Y eso tiene un tratamiento interdisciplinar en el que están involucrados los psiquiatras, los psicólogos, el nutricionista. La terapia de grupo funciona muy bien. Se forman grupos, fundamentalmente de mujeres, aunque ahora hay muchos hombres también, que al escucharse los unos a los otros les ayuda a ver que no están solos en esa situación de dolor y que forman parte de un grupo. Porque las personas que sufren estos trastornos de ansiedad viven en un secreto, en una burbuja que es un tabú. Están muy aisladas del entorno de la familia, no suele haber mucha comunicación porque no suelen transmitir lo que les pasa, sus miedos, sus interioridades. Porque están obsesionados con el control de la alimentación y de su cuerpo.

-¿Son trastornos individuales, pero quizá estemos hablando de una enfermedad social?
- Yo diría que si. Además lo curioso es que los trastornos alimenticios suelen surgir sobre todo en los países del mundo occidental, donde se da la combinación del consumismo y la imagen corporal. Hay que pensar que también nuestro cuerpo, nuestro aspecto corporal es como un pasaporte para obtener un trabajo, para entrar en una discoteca, en los clubs sociales, los grupos de amigos...la imagen es muy importante. Pero a veces se lleva esta preocupación a tales extremos que pueden ser muy dañinos.

- Por la imagen, precisamente, se detecta bien si una persona puede sufrir trastornos alimenticios.
- No necesariamente. La persona que sufra anorexia se puede ver porque tiene aproximadamente un 35% menos de masa corporal de lo recomendado. Pero hay otros trastornos, como la bulimia, difíciles de detectar, salvo los familiares. Otras personas sufren un trastorno de ansiedad muy común, el "pica" que consiste en comer cosas como el pelo, madera, chicle..es como rumiar, estar constantemente masticando algo, pero sin sustancia. Detectarlo no es fácil.

- ¿Cómo se ven a si mismos los enfermos?
- Se ven como que estuvieran continuamente fracasando, porque para ellos nunca es suficiente lo que hacen. El perfeccionismo es una de las características generales que tienen el común todas las personas con trastornos alimenticios: tienen que estar perfectos, nunca es suficiente. Ven el mundo como un embudo, porque todo se rige con la alimentación, planificada alrededor de la comida y de su cuerpo. Son personas que se pesan mucho, están constantemente buscándose los defectos. Su identidad está directamente vinculados a su cuerpo, y entonces valores como pueden ser la inteligencia y otras habilidades, como las sociales, pasan a un segundo o tercer plano. Y claro, si toda su identidad la basan en qué aspecto tienen y todo lo demás no es importante, fíjese qué conflicto. Es curioso. Como terapeuta he descubierto que es más fácil para la gente, sean personas con estos trastornos o no, decir las cosas que no les gustan de sí mismos que mencionar las cosas que sí les gustan. Cuesta más trabajo destacar las virtudes que descubrir los defectos.

22 octubre 2007

Educación integral en la lucha contra la anorexia.

Luis Beato, especialista en trastornos alimentarios, asegura que la autoestima juega un rol fundamental en el contexto de la prevención
R. SANTAMARTA / CIUDAD REAL

La educación es fundamental en todos los ámbitos y hábitos de la vida y el respeto al cuerpo, al igual que al medio ambiente, es uno de ellos. Sanidad ha tomado buena cuenta de ello en una iniciativa que Luis Beato, jefe de la Unidad de Trastornos Alimentarios del Hospital General de Ciudad Real, aplaude.

Desde su posición, considera que «la salud debe estar integrada en la convivencia y no debe quedar como una actividad aislada». En este sentido, pone de manifiesto que «una educación integral y en valores, no sólo estéticos, que haga énfasis en el cuidado del propio cuerpo es muy positiva».

«Es importante desterrar planteamientos como ‘eres lo que aparentes’ y poner el acento en principios como la honestidad, el respeto o la capacidad de integración del alumno orientada a conseguir su aceptación y una buena autoestima», indica el doctor Beato que, desde el mes de mayo, es el presidente de la Aeetca, la Asociación Española para el estudio de los Trastornos del Comportamiento Alimentario entre los que se encuentra la bulimia y la anorexia.

Es indudable que la autoestima juega un papel fundamental dentro del contexto de la prevención. Según afirma Luis Beato, su mayor o menor grado dependerá de la interacción del adolescente con su entorno. Por ello, señala que «corregir a los alumnos y estimularles es positivo». «Los niños pasan muchas horas en el colegio o en el instituto, de manera que los profesores pueden observar de cerca las relaciones que establecen. Además, un posible trastorno alimentario, como cualquier otro problema de conducta, repercutirá en su rendimiento escolar», matiza al respecto.

Sin embargo, a su juicio, ese estímulo debe estar fundamentado en el esfuerzo. Así, es necesario que se valore más la dedicación e implicación del alumno, que el resultado. «Hay chicos que cuentan con más capacidades y habilidades que otros, por lo que no se puede juzgar por el mismo rasero a todos», asegura a este respecto el responsable de la Unidad de Trastornos Alimentarios del Hospital General de Ciudad Real.

Y es que, tal y como ponen de relieve sus palabras, «el aspecto más interesante es conseguir que los alumnos menos aventajados, puedan conseguir una buena autoestima». «A veces me he encontrado con pacientes que, por su perfeccionismo y alta exigencia, se fijan en todo lo que hacen mal, en lugar de valorar los aspectos positivos», explica Beato.

En definitiva, «hay que construir en positivo favoreciendo la diversidad, la propia identidad y valores como el optimismo, la responsabilidad y la capacidad de enfrentarse a los problemas».

Campañas. Italia acaba de prohibir la publicidad de una conocida marca de ropa, en la que el fotógrafo italiano Oliviero Toscani, conocido por sus famosas campañas de Benetton, retrata el espíritu de la anorexia encarnado en el frágil cuerpo de la modelo francesa Isabelle Caro. En opinión de Luis Beato, «en el caso de este tipo de trastornos las campañas pueden generar un efecto contraproducente». Así, asevera, que con los adolescentes no funciona la premisa de «a mayor información, menor riesgo».

«Su efectividad en la prevención es bastante cuestionable», según su propia experiencia. «La mayoría de las pacientes que he tenido no pensaban que ellas podrían a llegar a desarrollar este trastorno, por el hecho de obsesionarse con su aspecto físico». De este modo, la modificación de su patrón dietético no es percibida como una conducta de riesgo.

18 octubre 2007

Neofobia infantil: chicos que sufren aversión a las comidas nuevas

La University College de Londres investigó a más de 5 mil pares de mellizos de entre 8 y 11 años. La mayoría mostró una aversión de origen genético. La patología se denomina "neofobia infantil". Hay técnicas para que los padres puedan ayudar a sus hijos a superarla

Un nuevo estudio de la University College de Londres ofrece algo de alivio a todos aquellos padres a los que les preocupa el hecho de que sus hijos nunca comen otra cosa más que leche chocolatada, vitaminas Gummi y alguna que otra uva ocasional. Un grupo de investigadores analizaron los hábitos alimentarios de 5.390 pares de mellizos de 8 a 11 años y descubrieron que la aversión de los chicos a probar comidas nuevas es mayormente hereditaria.

Por ende, el mensaje para los padres es el siguiente: no es su comida, son sus genes.

El estudio, liderado por la doctora Lucy Cooke, del departamento de Epidemiología y Salud Pública de la University College London, fue publicado en el American Journal of Clinical Nutrition en agosto pasado. La doctora Cooke y otros creen que se trata del primero en utilizar una medida convencional para investigar la influencia de la genética y el medio ambiente en la neofobia infantil (miedo a la incorporación de nuevos alimentos en la dieta).

Según el informe, las causas de la neofobia son genéticas en un 78 por ciento y ambientales en un 22 por ciento.

En los Estados Unidos, tanto los nutricionistas como los pediatras y otros investigadores académicos modificaron últimamente su foco para centrarse mayormente en los chicos que comen demasiado, en lugar de en los que comen poco. Pero los casos de obesidad son menos frecuentes que los ataques de selectividad extrema a la hora de elegir qué comer.

La mayoría de los chicos comen una amplia variedad de alimentos hasta los 2 años, cuando repentinamente dejan de hacerlo. La etapa puede durar hasta los 4 ó 5 años. Según los investigadores, se trata de una respuesta de la evolución. Las papilas gustativas de los chicos se cierran cuando empiezan a caminar, lo que hace que controlen más lo que comen.

Para Ellyn Satter, especialista en nutrición infantil cuyos libros son muy seguidos por los padres de todos los chicos "difíciles" para comer, un escepticismo natural frente a las comidas nuevas es parte saludable del desarrollo de un niño.

Para Satter, cada chico tiene una serie única de cosas que le gustan y no, que son determinadas genéticamente. Y la única forma, según Satter, en cómo los chicos descubren qué es cada cosa es colocándose los alimentos en la boca y sacándolos una y otra vez.

La conexión genética tiene sentido para la estadounidense Jennifer Useloff, cuyo hijo sólo acepta variaciones de nada más que queso y pan, con alguna que otra fruta y el ocasional bocadito de pollo frito. Useloff, de 36 años, era igual cuando era chica. A pesar de que tomaba litros de leche, no toleraba las verduras ni las frutas crudas. Las comidas nuevas le daban miedo.

Esta aversión de Useloff le duró hasta sus 20 y pico de años, cuando logró vencer sus temores. De todos modos, aún hoy se niega a comer pepino.

A pesar de que la neofobia parece ser genética, los médicos coinciden en que los padres de chicos difíciles no deben rendirse y cocinarles nada más que pastas.

"Debemos entender que la biología no es el destino", opinó Patricia Pliner, profesora de Psicología Social en la Universidad de Toronto. "Esto no significa necesariamente que no haya nada que podamos hacer sobre el medio ambiente que nos rodea".

Quienes estudian a los chicos proclives a tirarse al piso ante la mera mención del brócoli, coinciden en que la exposición repetida y serena a alimentos nuevos todos los días durante períodos que lleguen hasta las dos semanas es una forma eficaz para vencer los temores de un niño.

Otro método efectivo, adoptado por la esposa del actor Jerry Seinfeld, madre de tres, es por ejemplo esconder los alimentos bajo la forma de purés, que se mezclan con las comidas.

Seinfeld cubre por ejemplo una fuente de pasta con manteca con una taza de calabaza procesada. A la masa de los panqueques le agrega remolacha procesada y a la mezcla de los brownies le incorpora espinaca.

Para empezar: cómo enseñar a comer a los bebés
- Tolerar que el bebé reciba o rechace alimentos según su gusto.
- El vaso de leche no debe ser reemplazado por mate cocido, té o café. Si rechaza la leche puede significar que no tiene hambre.
- Ofrecer nuevamente los alimentos rechazados luego de unos días.
- No darles jarabes ni vitaminas que aumenten el apetito.
- No introducir nuevos alimentos cuando están enfermos. Si no quieren comer, ofrecerles pequeñas cantidades de aquellos que les dan placer.
- No dar premios o castigos relacionados con la comida.
- No agregar sal a las comidas.
- No correr con la cuchara detrás del bebé.

(De "Manual de instrucciones del bebé", del doctor Jorge Nasanovsky)

La marca Famosa fabrica un modelo de Nancy contra la anorexia.

La muñeca se presenta con una talla «saludable» que huye de la delgadez



Los responsables de Famosa afirman que la nueva Nancy está basada en un modelo estético de salud

M.V.
Dentro de la política de apostar por los artículos clásicos, Famosa ha realizado una profunda renovación de la veterana Nancy, que ha traído consigo una muñeca moderna, atractiva y, al mismo tiempo, «saludable», en una época en el que la anorexia o la bulimia son un motivo de preocupación sobre todo entre las chicas jóvenes. Responsables de Famosa explicaron que a la hora de concebir la nueva Nancy se ha buscado un «modelo estético de salud», haciendo una muñeca más rellenita que huya de delgadeces extremas.

Con 39 años de historia, Nancy es uno de los productos estrella de la firma juguetera de Onil. Aunque la muñeca es un clásico, la dirección de la empresa la mantiene en constante transformación. El modelo actual es fruto de un proceso de investigación, que ha incluido consultas con madres que en su día tuvieron la Nancy y que ahora les regalan la muñeca a sus hijas.

En todas estas encuestas se coincidía en señalar que las niñas preferían a la Nancy, por que era «la muñeca más guapa» y la más moderna. Nos encontramos ante un artículo que ha sido capaz de resistir el paso del tiemo y que es tras el Nenuco, es el muñeco más vendido por la empresa juguetera de Onil.

Este año se lanzan dos modelos: una que practica el wind surf y otra que sube a caballo. En los dos casos se presenta una muñeca muy actual, pero los responsables del diseño han tenido claro que se tienen que mantener unas proporciones saludables, que fijen en las niñas un modelo humano que esté lejos de la anorexia. La Nancy surfista deja ver una leve barrigita.

Subida de facturación Por su parte, el director comercial de la compañía, juguetera Ignacio Ramos, manifestó que Famosa espera incrementar este año la facturación alrededor de un 15%, lo que supondrá alcanzar los 175 millones de euros. Ramos indicó que tras la compra de Feber la empresa ha consolidado sus 600 puestos de trabajo, con cada vez menos puestos eventuales.

Recordó que se están recuperando líneas de producción que se encontraban en China, como es el caso del Nenuco Solete, resaltando que el 40% de la fabricación de la firma está en España. En el proceso de expansión empresarial uno de los objetivos prioritarios es ampliar las ventas en la zona de influencia de Estados Unidos.

01 octubre 2007

El Consell Audiovisual presenta consejos sobre cómo abordar la anorexia en TV

EUROPA PRESS
BARCELONA

El Consell de l'Audiovisual de Catalunya (CAC) ha presentado una serie de consejos para los profesionales de la radio y la televisión sobre el tratamiento de la anorexia y la bulimia, entre los que destaca no incluir en horario protegido (de seis de la tarde a diez de la noche) publicidad de productos destinados a la pérdida de peso.

Los consejos del CAC pretenden fomentar la autorregulación de los medios cuando tratan temas vinculados a los trastornos de la conducta alimentaria en la publicidad, los informativos, los magazines y los programas de ficción. La iniciativa ha surgido a raíz de una petición de la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia y el documento final ha contado con la elaboración de la Conselleria de Salut, el Col.legi d'Infermeria de Barcelona y el Col.legi de Metges de Barcelona.

Diversidad del físico

Durante la presentación del documento, que recoge 26 recomendaciones, la consejera Victòria Camps ha destacado que, si bien no ha habido un aumento de quejas, "quizás se banaliza" el tema de la anorexia en algunas informaciones y se da "una sola imagen de la persona, la adolescente, joven, delgada, ideal", por lo que ha abogado por una mayor "diversidad" del físico de las personas.

En cuanto a la publicidad, el CAC pide que la información sobre productos de pérdida de peso, como saciantes y dietéticos, sea "clara" y que no cause "confusión". Propone no presentar los productos como "milagrosos" ni como "imprescindibles" en la dieta de las personas, así como no otorgarles propiedades nutritivas que no tienen. Aconseja no presentar productos y bebidas azucarados, como golosinas y snaks para sustituir de las comidas habituales, sobre todo cuando se dirigen a niños y adolescentes.

Sin sensacionalismo ni morbo

Sobre la producción de contenidos audiovisuales, el CAC dice que hay que evitar el sensacionalismo y el morbo en las informaciones, además de ser muy cuidadosos con el vocabulario. Aconsejan no dar nombres de los medicamentos ni facilitar páginas web de internet. El CAC pide minimizar el efecto de los estereotipos y los cánones de belleza, lo que incluye a las presentadoras de los programas y los informativos.

El documento incluye un apartado dirigido a los padres, como responsables de la educación de los hijos, y apuesta por fomentar un espíritu crítico ante los medios de comunicación, sobre todo ante cuerpos de extrema delgadez en niños, adolescentes y jóvenes.

30 septiembre 2007

Enfermas de anorexia dan la espalda a Toscani





Alrededor de 500.000 personas sufren trastornos de conducta alimentaria, el más grave, la anorexia, la enfermedad psiquiátrica con mayor índice de mortalidad en España.

ANA SALAMANCA/EFE

Las enfermas, perfeccionistas, exigentes con ellas mismas, han sentido "dolor" al ver la campaña publicitaria de Oliviero Toscani para una firma de ropa.

Tras la aparición en grandes vallas de la imagen extremadamente delgada de la modelo Isabelle Caro, una campaña que respalda el Ministerio de Sanidad en Italia, difundida por los medios de comunicación, y rechazada aquí por asociaciones médicas y publicistas, el debate ha llegado a los centros terapéuticos, y ha despertado indignación.

Laura Sanjurjo, de 28 años, ingresada en un hospital barcelonés afirma que esa imagen "pondrá los pelos de punta a la gente sana, le dará lástima, pero hay otras personas en fase incipiente de esta enfermedad que la van a utilizar como un prototipo". "Con lo competitivas que somos, nos lo ponen en bandeja".

Alguien colgó la fotografía en el centro que tiene en Cabrils (Barcelona) el Instituto de Trastornos Alimentarios (ITA), pero lo retiraron -explica-. Ella ha visto la imagen por Internet, acompañada de su terapeuta, y leyó alguna noticia.

Licenciada en Económicas, con un máster de dos años terminado "y otro en camino, cuando salga de esto", Laura entró en el túnel con su hermana gemela, ingresada en otro hospital del ITA en Barcelona, y con la que no tiene comunicación, por consejo de los médicos que tratan a ambas.

Han pasado seis semanas desde su ingreso y está motivada en su recuperación, con ganas de salir, aunque desconoce su peso actual: "forma parte de la terapia", explica esta Canaria, muy crítica con los responsables de la campaña.

"No han analizado las consecuencias que puede acarrearnos".

"Estamos sumamente dolidas", afirma, por el poco respeto que hay en esa imagen, "prueba de que la sociedad no ha tomado conciencia de la gravedad y el sufrimiento de la enfermedad".

Ella ve en la modelo alguien "triste, infeliz, que ha perdido las ganas de vivir", y considera el anuncio totalmente contraproducente, porque hay otras maneras de prevenir: "mientras existan en las tiendas marcas de la talla 32, muchas chicas lucharán por embutirse en ellas".

ME DERRUMBE Y LLORABA

"Al ver la imagen de Toscani me sentí herida. Por la noche me derrumbé y lloraba, por todo lo que removió", dijo a EFE Cristina Trilla, de 25 años, estudiante de sexto de Medicina, que acaba de publicar su historia en un libro, "Hoy he decidido dejar de comer".

"La anorexia no es eso", argumenta. "No es estar extremadamente delgada, es un problema psicológico de falta de autoestima, de ilusiones, de no creer en ti misma... exteriorizado a través de la comida y el cuerpo".

La fotografía es impactante -agrega- "pero se olvida a la persona que hay detrás. Una chica anoréxica con un nombre, una historia, que necesita ayuda, esté como esté. El grado de sufrimiento no se mide en kilos".

Considera que no es habitual exhibir tu cuerpo de esa forma, "yo me escondía porque la gente ve tu enfermedad, me sentía mal,...

Ahora veo que es necesario hablar de ello, pero de ahí a hacer un circo hay gran diferencia".

En general, enfermos y psiquiatras coinciden en que "lo que define la enfermedad no es el cuerpo, sino el sufrimiento de las personas", en palabras de Enric Armengou, de la Fundación para la prevención de la Anorexia y Bulimia (ABB).

A los que se han recuperado, la publicidad les recuerda el dolor pasado y a los que están en fase de afrontarla no les lleva a plantearse "qué estoy haciendo con mi vida, dejaré de hacer trampas con la comida, pido ayuda...", agrega el psiquiatra.

"La propia foto -analiza- es gallarda, no es de alguien sufriendo, por mucho que tenga una úlcera en el coxis. La mirada es desafiante. A nadie le dice: ánimo, salgamos de esto".

ATRACONES, VÓMITOS

Esa imagen casi cadavérica no responde al perfil actual de la enferma con trastornos alimentarios, dijo a EFE Montse Sánchez, directora del ITA.

Se estima que hay 500.000 personas con patologías alimentarias, no con extremada delgadez, pero sí con incapacidad de seguir una vida normalizada, estudios, trabajo y autonomía.

Hoy el perfil más común es el de una chica de peso normal que utiliza el atracón, el vómito, tiene alteraciones de conducta graves, trastorno de los impulsos, ansiedad, conductas autolesivas,... No llega a esos extremos de caquexia, pero los síntomas entrañan una patología mental, explicó Montse Sánchez.

La anorexia, según la endocrinóloga Susana Monereo, tiene un riesgo y una tasa de muerte (el 8%) "más alta que cualquier enfermedad nutricional".

Un 30% de los casos se cronifica, un 25% se cura y el resto mejora considerablemente, añade la directora del ITA.

Es el problema de salud con mayor prevalencia en mujeres adolescentes y jóvenes, aunque cada vez aparecen casos a edades más tempranas y adultas, y en varones.

Algunos rasgos de personalidad -perfeccionistas, vulnerables, inseguros, con baja aceptación personal y dificultad para expresar las emociones- predisponen a estos trastornos. Además de los malos hábitos alimentarios y otros como vivir en familias muy exigentes y dependientes de la imagen.

"Está contrastado que una tendencia perfeccionista exagerada es un factor de riesgo", asegura Luis Rojo, responsable de la Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria del Hospital La Fe.

La enferma de anorexia suele tener "una excesiva preocupación por los errores, se plantea unos rendimientos muy altos, a veces fuera de sus capacidades, los valora como éxito o fracaso y, como sus exigencias son tan altas, generalmente entiende que no le va bien".

GENÉTICA Y EXPERIENCIAS

Una investigación realizada entre 300 parejas de gemelos de la comunidad valenciana, que Luis Rojo expuso este jueves en el Congreso Nacional de Psiquiatría de Santiago de Compostela, pone de manifiesto que, en las mujeres adolescentes, el impulso a estar delgada, la insatisfacción corporal o el perfeccionismo están influidos por una interacción de factores genéticos y condiciones ambientales o experiencias individuales.

Para el estudio, y con el objetivo de determinar el peso de los factores genéticos y ambientales, se seleccionaron 150 parejas femeninas, más de la mitad gemelas idénticas, de un programa de prevención de la Generalitat Valenciana en el que han participado 80.000 escolares de entre 12 y 16 años.

La genética -explica Rojo- no es la única razón de los problemas alimentarios, "sino que estamos en una cultura en la que se favorece que se expresen estos trastornos".

La publicación de una imagen femenina ultradelgada, una modelo -aunque aparezca el lema 'no anorexia'-, "transmite que esto es permisible y la población insatisfecha con su cuerpo puede verse influida negativamente".

Por otro lado, estos enfermos, que en cierta medida están resolviendo a nivel corporal otras dificultades que tienen consigo mismos y en las interacciones sociales, pueden pensar "ahí está, se gana la vida, la miran,... se ha hecho famosa, y sólo falta que les des un bastión para que eso se haga real", concluye.

La mejor campaña sería plasmar imágenes saludables, enseñar a comer bien, opina Susana Monereo, encargada del control de peso en las modelos de Pasarela Cibeles, "pero eso no vende".

26 septiembre 2007

Tomar agua con el estomago vacío

Tomar agua con el estomago vacío


En Japón es muy popular el tomar agua inmediatamente después de levantarse cada mañana. Aun más, existen pruebas científicas que demuestran su valor. En el caso de enfermedades crónicas así como también en el caso de enfermedades recientes, la eficacia del tratamiento del agua ha sido demostrada por una sociedad médica
japonesa como una cura de un 100 % de las siguientes enfermedades:

Dolor de cabeza, dolores del cuerpo, sistema cardiaco, ritmo cardiaco acelerado, epilepsia, exceso de peso, bronquitis, asma, tuberculosis, enfermedades renales y urinarias, gastritis, diarrea, hemorroides, diabetes, estreñimiento, constipación, todas las enfermedades de los ojos, útero, cáncer e irregularidades menstruales, enfermedades de los oídos, nariz y garganta.

Así se hace:

1.- Tomar 4 vasos de agua de 160 ml (6 onzas) al levantarse en la mañana antes de lavarse los dientes.
2.- Cepille sus dientes y enjuague su boca pero no tome o coma nada hasta que hayan transcurrido 45 minutos.
3.- Después de esos 45 minutos se puede comer y beber lo habitual.
4.- Después de 15 minutos tras el desayuno, almuerzo o comida no tomar agua durante 2 horas.
5.- Aquellas personas de edad avanzada o enfermas que no puedan tomarse los 4 vasos de agua al principio pueden comenzar tomando pequeñas cantidades e incrementarlas gradualmente hasta llegar a los 4 vasos recomendados.
6.- El método antes señalado curará las enfermedades de los enfermos y ayudara a vivir una vida mas placentera a las personas sanas.

La lista siguiente ofrece el numero de días de tratamiento necesarios para curar/controlar/reducir las enfermedades principales:

1. - Alta presión arterial - 30 días
2. - Gastritis - 10 días
3. - Diabetes - 30 días
4. - Estreñimiento - 10 días
5. - Cáncer - 180 días
6. - Tuberculosis - 90 días
7. - Pacientes con artritis deben seguir el tratamiento de la forma siguiente: solamente 3 días en la primera semana y diariamente a partir de la segunda semana.

Este tratamiento no tiene efectos colaterales, sin embargo al principio del tratamiento usted tendrá que orinar varias veces al día.

Seria ideal continuar el tratamiento y hacer del mismo una rutina diaria de nuestra vida.

21 septiembre 2007

Incrementar el tráfico de un blog (off-topic)

He descubierto un nuevo escaparate donde poder dar a conocer a más personas tu blog, para quien le interese, aquí va:
http://www.boosterblog.es

Pensé que era una más de mis paranoias, ahora los investigadores también sostienen mi teoría...

Las ‘’redes de la obesidad’’ existen

Un grupo de investigadores estadounidenses que estudió las llamadas "redes" de la obesidad, sí cree que los amigos y familiares pueden contribuir a que una persona engorde e incluso se vuelva obesa
Las ‘’redes de la obesidad’’ existen
Según las fuentes científicas citadas por Reuters, los hermanos y los cónyuges también tendrían influencia, aunque menor: las personas cuyos hermanos se vuelven obesos eran 40 por ciento más propensos a engordar, mientras que cuando quien aumentaba de peso era la pareja, las posibilidades de volverse obeso eran del 37 por ciento.

"Este es el primer (estudio) que muestra cómo la obesidad se extiende a través de una red social de persona a persona", señaló en una conferencia telefónica James Fowler, de la Universidad de California, en San Diego, quien trabajó en la investigación.

En un artículo publicado en el New England Journal of Medicine, los investigadores dijeron que sus resultados demuestran que la obesidad es contagiosa, no como un virus, sino en un sentido social.

18 septiembre 2007

Un nuevo trastorno alimentario femenino

Un nuevo trastorno alimentario está a punto de ser bautizado y reconocido como enfermedad, el de la expurgación o eliminación continua de los alimentos, ya sea a través del uso de laxantes o de los vómitos. En verdad, el desorden es similar al de la bulimia nervosa, y comparten el hecho de que ambos síndromes implican comer por demás, intentando compensar las calorías.

Lo que convertiría al uso de purgantes como un desorden diferente es la cantidad de alimento consumida y la manera en que los enfermos compensa lo que comen. Las mujeres con purging disorder comen cantidades normales o aún pequeñas de alimento, pero después lo expulsan, a menudo, con vómitos. La diferencia es que aquellas que padecen de bulimia tienen grandes episodios de atracones alimenticios, que se van de control, y que después son seguidos de purgas, ayuno, o ejercicio excesivo.

“El desorden de la expurgación es nuevo, en el sentido de que no se ha sido reconocido oficialmente como una condición única en la clasificación de los desórdenes de la alimentación – explica Pamela Keel, profesors de psicología en la UI de artes y ciencias liberales-. Pero no es un nuevo problema, as mujeres han estado luchando con el desorden de la expurgación mucho antes de que comenzáramos a estudiarlo.”

En un paper o documento científico editado en la prestigiosa publicación especializada Archivosde Psiquiatría General, Keel comparte los resultados de su estudio, hincando que el desorden de la expurgación es un problema significativo entre las mujeres, y diferente del de la bulimia.

La investigadora reclutó a participantes del estudio, a las que dividió en tres grupos: mujeres sin desórdenes alimentarios, mujeres que eliminan sus ingestas para compensar atracones, y mujeres que usan los laxantes o los vómitos para controlar su peso o forma corporal, pero que no tienen “borracheras comilonas”.

Keel descubrió que las mujeres con desorden de expurgación comparten algunas características con las bulímicas: ambas experimentan depresión, ansiedad y perturbación en cuanto a su imagen corporal y a las dietas, cosa que no se da entre las mujeres que no padecen desórdenes alimentarios.

Pero el estudio estadounidense también proporcionó evidencia de que el desorden de la expurgación sería una enfermedad distinta: la diferencia entre las mujeres con esta enfermedad y las bulímicas estaría basado en un mecanismo fisiológico que influye sobre la ingesta de comida.

Quienes padecen de trastorno expurgatorio mostraron una mayor sensación de estómago lleno y plenitud luego de comer, comparadas con las mujeres que tienen bulimia y con las que no tienen ningún trastorno de la alimentación.

Keel admite que es preciso llevar a cabo más investigaciones sobre el desorden expurgatorio, para comprenderlo mejor y apoyar su inclusión dentro de la actual clasificación médica de los desórdenes alimentarios.

“Debido a que tendemos a estudiar sólo los desórdenes formalmente definidos, hay una brecha entre los problemas que tienen las personas y lo que nosotros sabemos acerca de esos problemas. Identificar este desorden estimularía la investigación sobre sus causas, su tratamiento y su prevención, todo lo cual podrían aliviar la ansiedad y el deterioro que sufren las mujeres que padecen la enfermedad.”


Ahora, la investigadora está trabajando en un estudio complementario que explore por qué algunas mujeres sienten la necesidad de eliminar lo que comen con laxantes o vómitos, sin tener en cuenta que se trata de cantidades normales e incluso pequeñas de alimento.

www.saludyciencias.com.ar

11 septiembre 2007

El 75% de los enfermos adultos con trastornos alimentarios han padecido anteriormente problemas de sobrepeso...

...según un estudio de la Fundación ABB, dedicada a la prevención de la anorexia y bulimia hecho público ayer.

La Fundación ABB considera que la inseguridad y la dependencia de estos niños respecto a su cuerpo padecida durante la infancia generalmente se prolonga hasta la adolescencia y la edad adulta.

España es un país con un índice de obesidad infantil del 16%, una cifra que preocupa a los profesionales porque en 1990 el porcentaje era del 5%. Las principales causas son la mala alimentación, agudizada por los hábitos familiares y las prisas cotidianas, el abuso de alimentos no necesarios y una vida sedentaria ocasionada por pasar muchas horas en el pupitre, frente al televisor o delante de la pantalla del ordenador.

La directora de la Fundación ABB, la psicóloga Raquel Linares, indicó que a estos elementos hay que añadir "una sobreprotección de los padres respecto a sus hijos y una falta de límites bien marcados, elementos que a medida que el niño crece se convierten en problemas de autoestima, inseguridad y falta de valores personales frente intereses puramente superficiales como es la imagen y la gratificación inmediata".

Con motivo del inicio del curso escolar, Linares defendió que los colegios tengan una materia de promoción de la salud integral y talleres extraescolares donde los niños puedan aprender comunicación emocional y crecimiento personal, con el fin de adquirir autoestima y obtener recursos para mejorar la seguridad personal.

07 septiembre 2007

'Malos Hábitos' brilló en Montreal

La opera prima ganó el premio Silver Zen

"Malos Hábitos" es la primera experiencia como director de Simón Boss

La cinta mexicana Malos Hábitos, opera prima del director Simón Bross, triunfó en el World Film Festival de Montreal, festival de competencia más prestigiada en Canadá, al ganar el premio Silver Zenith, en la competencia de Ópera Prima Largometraje de Ficción.

"Hace seis años me dio cáncer y me curé, pero cuando no sabía si iba a vencer la enfermedad, quise hacer una película, sin ponerme a pensar a qué público iba dirigida, ni si estaba destinada para cierto target, ni si el tema era interesante o para ganar concursos. Es hora de hablar de anorexia en las familias", Bross.

Un filme salido del corazón

Malos Hábitos es una cinta que refleja Malos Hábitos, es la historia de una familia unida por diversos desórdenes alimenticios. La fe, el amor y la vanidad son puestos a prueba en la mesa del comedor.

Malos Hábitos es la historia de tres mujeres y la manera en que sus hábitos alimenticios dominan y determinan sus vidas hasta el extremo.

La meta del Montreal World Film Festival, Festival de Cine Internacional de Montreal, es fomentar la diversidad cultural y el entendimiento entre naciones, alimentar el cine de todos los continentes al estimular el desarrollo de cine de calidad, para promover cineastas y trabajos innovadores para así descubrir y fomentar nuevos talentos y para promover encuentros entre profesionales del cine de todo el mundo.

Más del director

Simón Bross cuenta con 20 años de trayectoria en el medio audiovisual. Además de ser el director más premiado en la historia de la publicidad mexicana e iberoamericana, ha incursionado en la producción de largo y cortometrajes como Quién diablos es Juliette, Segundo Siglo, Free Tibet y algunos documentales conservacionistas y proyectos editoriales.

Malos Hábitos es su primera experiencia como director de cine y obtuvo el premio a la Mejor Película Mexicana en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara 2007.


Univision Online y Agencias

04 septiembre 2007

Hombres y trastornos alimenticios.



Quizá el mayor de los problemas en torno a la bulimia en los hombres es que se puede esconder con relativa facilidad. No causa la misma impresión de que algo anda mal ver vomitar a alguien que verlo haciendo ejercicio sin parar. Es más, a menudo la familia y los amigos de estos varones los felicitan y los motivan a seguir adelante. “Una de las expresiones más comunes dentro de los pacientes de bulimia es que se sienten totalmente descontrolados, que el ejercicio para ellos se ha convertido en una obsesión, dejando de lado por completo, por ejemplo, su vida académica o laboral”, comenta la psicóloga clínica especializada en trastornos alimenticios Brigitte Aquín.

Cuando el hacer ejercicio abarca un 80 por ciento de la vida de un hombre, el trastorno alimenticio ya existe. Estos varones suelen someterse a estrictas dietas de proteína, lo cual solo dispara el trastorno. Su obsesión no es la delgadez, como pasa con las mujeres, sino los músculos. “La mayoría son jóvenes alrededor de los 20 años y que en algún momento padecieron de sobrepeso. Muchos terminan tomando esteroides para desarrollar más músculos y eso ya se considera un trastorno, que puede empezar en la pubertad”, agrega Aquín.

En estudios recientes se demostró, a través de la presentación de fotografías a un grupo de mujeres, que estas suelen gustar de hombres con alrededor de 20 libras menos de músculo que lo que los hombres creen que ellas prefieren. “El trastorno no se quita dejando el gimnasio, necesita tratamiento psicológico como cualquier obsesión.

Los gimnasios esconden a muchos enfermos y los hombres son más reacios a buscar ayuda que las mujeres”, explica Aquín.

Dentro de la población masculina también hay cada vez más casos de anorexia nerviosa y de obesidad, aún en varones de escasos recursos. Un trastorno alimenticio suele tardar entre 8 y 15 años de tratamiento psicológico para ser superado. “Lo importante es la prevención o detectar los síntomas a tiempo para buscar tratamiento lo antes posible”, finaliza Aquín.

03 septiembre 2007

Anorexia y bulimia en la 2 de televisión española.

El programa de La 2 "Crónicas" emite mañana el reportaje "Mi cuerpo, mi enemigo", sobre la anorexia y la bulimia, transtornos de conducta de la alimentación que se han convertido en una epidemia.

Cada vez son más los adolescentes, y también más adultos, los que sufren este enfermedad mental que origina terribles secuelas y las que más muertes producen: un 5 por ciento entre los enfermos de anorexia y un 2 por ciento en los de bulimia.

El equipo de "Crónicas" convivió con estas personas en un centro especial donde la disciplina, sobre todo a la hora de las comidas, marca las pautas del día.

Todas ellas intentan afrontar un problema que arrastran desde hace tiempo, algunas incluso son reincidentes, ya que consiguieron recuperarse pero han vuelto a caer y saben que tendrán que estar ingresadas durante varios meses.

El programa también estuvo con Sergio y Leticia, dos veinteañeros que intentan normalizar sus vidas, hasta ahora muy marcadas por la anorexia.

Ambos comparten piso con otros jóvenes que están en su misma situación, y mientras Leticia continua sus estudios, Sergio ha conseguido un empleo en una tienda de ropa.


Martes, 4 de septiembre de 2007
23:05 CRÓNICAS
MI CUERPO, MI ENEMIGO
DIRECCIÓN: REYES RAMOS

El teléfono sobre nutrición y trastornos alimentarios ya ha recibido 830 llamadas.

El teléfono gratuito sobre nutrición y trastornos alimentarios de la Comunidad de Madrid (900 60 50 40) ha recibido desde que entró en funcionamiento, a finales de 2006, hasta agosto de este año, más de 830 llamadas.

El perfil de la persona que consulta este teléfono es el de una "mujer casada, de entre 19 y 35 años, que trabaja, y que demanda información sobre temas relacionados con el sobrepeso, las dietas o la correcta alimentación", según la Consejería de Sanidad.

Del total de llamadas atendidas, el 54,49 por ciento correspondió a preguntas sobre nutrición y el 35,56 por ciento a asuntos de psicología clínica (trastornos alimentarios), sobre todo por problemas relacionados con la anorexia (45 por ciento), seguido de la bulimia (28 por ciento) y en demanda de apoyo al inicio o proceso del tratamiento de estas enfermedades. También destaca el número de personas (21 por ciento de las llamadas) que preguntan sobre indicios para la detección de un posible trastorno alimentario tipo anorexia.

Las consultas relacionadas con la anorexia las realizan en el 67,42 por ciento de los casos los propios familiares de personas afectadas, frente a las llamadas sobre bulimia, en las que prevalecen las peticiones de personas que sufren este trastorno (el 57,32 por ciento). Respecto a los asuntos de nutrición (449 llamadas), destacan las consultas sobre hábitos alimentarios en situaciones de sobrepeso (24,94 por ciento de las llamadas), seguidas de otras sobre cualidades de los alimentos (14,92 por ciento) y consultas sobre hábitos alimentarios y peso adecuado (13,36 por ciento de las llamadas), de alimentación específica (12,03 por ciento de las llamadas), y dietas (10,91 por ciento).

Esta línea de atención telefónica de la Consejería de Sanidad permanece operativa desde las 9.00 hasta las 18.00, de lunes a viernes laborales y está atendida por un equipo de psicólogas formadas en aspectos relativos a la alimentación y los trastornos de la conducta alimentaria, con apoyo de expertos en nutrición y dietética.

26 agosto 2007

Un piloto de Fórmula 1 confesó que tuvo bulimia

EL "ESCOCÉS VOLADOR" SACÓ SU AUTOBIOGRAFÍA

David Coulthard, que tiene 13 victorias en Grandes Premios en su carrera y actualmente está en el equipo Red Bull, sufrió esa enfermedad en su juventud. Con 1,83 metros de altura, pesaba sólo 57 kilos.


David Coulthard, conocido como el escocés volador de la Fórmula 1 confesó haber sufrido bulimia en su juventud. En su autobiografía, el actual piloto del equipo Red Bull, ganador de 13 Grandes Premios en toda su carrera, reveló que tuvo ese problema cuando competía en el kart y pesaba más que sus rivales.

" Dejé de tomar comida con grasa y antes de que supiera lo que pasaba, tenía bulimia", reveló el piloto de 36 años en su autobiografía It is what it is (Es lo que es), que hoy reprodujo la prensa británica.

"Desde mi punto de vista, el único modo de mantener bajo mi peso era vomitar", contó Coulthard, que con 1,83 metros de altura, llegó a pesar sólo 57 kilos, cuando en la actualidad la balanza indica 72,5.

"Siempre quise correr, desde que comencé en los karts", escribió Coulthard, que en su adolescencia pesaba más que sus rivales y empezó a luchar por bajar. "Estuve muy delgado. Era piel y huesos. Me pesaba por la mañana, por la tarde y por la noche", confesó.

Coulthard, primer piloto que reconoce haber sufrido bulimia, aseguró que seguirá corriendo el próximo año en el equipo Red Bull, en la que será su décimo cuarta campaña en la Fórmula 1.

Sin embargo, su caso no es el primero entre deportistas de alto nivel. La gimnasta norteamericana Christy Henrich murió en 1994 con sólo 22 años el campeón olímpico alemán de remo Bahne Rabe falleció en agosto de 2001 dos días antes de su 36 cumpleaños como consecuencia de una anorexia nerviosa.


Fuente: DPA

Varones de cuerpos vigorosos

Por: Pablo Suárez (ARTEMISA)

Leandro tiene 25 años y hace dos es modelo publicitario. La exposición continua y la búsqueda del cuerpo perfecto lo dejaron internado con una intoxicación de pastillas. No es el único caso. Los últimos datos de la Asociación Lucha contra la Bulimia y la Anorexia (Aluba) indican que en los últimos 2 años, la cantidad de hombres con bulimia y anorexia aumentó 44%.

¿Qué se muestra y qué se esconde detrás de este fenómeno?

Al igual que las mujeres, los hombres porteños buscan, cada vez más, tener cuerpos perfectos, esos que garantizan la admiración y aceptación instantánea en prácticamente cualquier ámbito de lo público y, más aún, de lo privado.

A diferencia de ellas, en cambio, la búsqueda masculina del cuerpo ideal no parece estar en los cuerpos sumamente delgados y casi sin formas, sino más bien en los cuerpos fuertes, macizos, de músculos torneados y abdominales marcados. A pesar de que no hay estadísticas oficiales precisas, la práctica clínica muestra que, en relación a las mujeres, son muy pocos los hombres que sufren de anorexia o bulimia, y, a su vez, también la cifra es baja en relación a otro trastorno solamente masculino: la vigorexia, la búsqueda obsesiva por la perfección del cuerpo, de moda en gran parte del mundo occidental.

'Como patología, la vigorexia todavía no figura en los libros de psiquiatría clínica. El nombre se lo puso en 1993 el psiquiatra Harrison Pope del Hospital Mac Lean de Boston', explica Adriana Bertoletti, médica psiquiatra.

'En el hombre se da en esa búsqueda por ser musculoso. Y también se da una distorsión de la imagen corporal: aún estando en el gimnasio seis veces por semana, entrenando metódicamente y estando realmente vigorosos, muchos hombres se siguen viendo enclenques y escuálidos. Una distorsión entre lo que son sus verdaderos cuerpos y lo que el espejo les refleja. Y si bien las causas son individuales, de acuerdo a la historia de cada persona, en lo general se ve en esta tendencia una necesidad de verse bien, pensando que uno así se relaciona mejor con el otro. Sin embargo, esta búsqueda los lleva más a la soledad y al aislamiento. Por un lado, se siguen viendo `enclenques`, `feos`; y por el otro lado, forman como una coraza que no deja que otras personas realmente se les acerquen'.

Así, con una supuesta voluntad manifiesta de ser incluidos, de ser reconocidos, de ser vistos por otros, estos cuerpos perfectos se encargan de dejar de lado la posibilidad de un contacto personal y, por ende, se resguardan de lo que parece ser más peligroso: un vínculo. El encuentro que proponen es, por sobre todo, superficial y efímero. Y del mismo modo, quiénes se les acercan parecen entender el mensaje.

'Si busco tener sexo para divertirme, me gusta y me importa que sean lindos de cara, cara de lindas facciones, y que tengan lindo cuerpo, cuerpo marcado de gym, músculos marcados. Si es solamente algo sexual, el aspecto físico es lo más importante. Pero si busco algo más, como un intento de noviazgo o una relación o una pareja, el aspecto físico está como en un segundo plano porque te fijás más cómo es la persona, obvio que te tiene que gustar, pero no es lo más importante', dice Federico, 23 años.

Como muchos hombres gays, Federico privilegia claramente un estereotipo físico para encuentros de sexo casual. Ahora, ¿hasta qué punto los encuentros posibles no están un tanto predeterminados por una imagen de moda? ¿Cuánto se puede ver cómo es la persona si lo físico está tan sobrevalorado? ¿Qué se muestra y qué se esconde? 'Es que ponen en el cuerpo todo lo que no pueden poner en otro lado. Es un modo de estar muy fijados en sí mismos, en un recorte, y pierden de vista un panorama mucho más amplio. Si bien el erotismo siempre tiene que ver con una parte del cuerpo, esto no va hacia el erotismo, sino hacia una perfección ideal que nunca van a alcanzar', explica Bertoletti.

La tiranía de la imagen de un cuerpo perfecto creada por una cultura postmoderna que tiene como uno de sus valores supremos a la apariencia, al aspecto externo, termina, paradójicamente, generando hábitos de conducta que van en detrimento de algo esencial: el cuidado del propio cuerpo. Es que en la búsqueda de ese cuerpo soñado, el costo que se paga es, la gran mayoría de las veces, tan alto como el ideal de perfección al que se aspira. Un precio altísimo por un cuerpo ideal que, tarde o temprano, lo termina pagando el cuerpo real.

'Cuando una persona deja de lado sus tareas habituales, sus hábitos y tiempos de descanso para dedicarse casi por completo al gimnasio para conseguir un cuerpo perfecto, eso ya es un caso de vigorexia', explica Omar Cepúrbeda, médico nutricionista. 'En el centro, hay un tema de distorsión de la imagen. Las personas que sufren de vigorexia se ven gordos, o que no están bien o, a veces, hasta se ven muy flacos. En realidad, están totalmente normales, lo mires por donde lo mires, pero ellos se ven de otro modo. Por eso, como médico, lo que hacés es confrontar a la persona con su situación y, de a poco, intentás hacerle ver que su cuerpo es normal, que su peso es normal, que su figura es normal.'

Leandro tiene 25 años, es modelo publicitario desde hace 2 años, y ya está agobiado: la presión continua por tener un cuerpo y mantener una cara en estados de belleza ideales hacen que su vida cotidiana sea una sucesión de dietas, largas horas en el gym, cuidados de todo tipo a toda hora. 'Cuando empecé a modelar, estaba bien de cuerpo, bastante bien. Pero me di cuenta enseguida de que muchos de los otros chicos estaban mejor que yo, y me sentí bastante mal. Por eso empecé a entrenar más días en el gimnasio, a hacer dieta, a correr, hacía de todo. Pero igual no estaba tan marcado como ellos, entonces empecé a tomar pastillas para quemar grasas, era la forma más rápida de sacarme lo que sobraba. A las semanas estaba perfecto, sin un rollo, bien marcadito. Seguí tomando las pastillas para mantenerme así como estaba, pero me duró poco porque las tuve que dejar cuando me vinieron dolores fuertísimos en el estómago, me descompuse varias veces y terminé internado. Me había intoxicado, no era el estómago, era el hígado, casi tengo hepatitis medicamentosa. Al final no la tuve, pero tuve que estar internado unas semanas.'

'La gran mayoría de los encuentros casuales se dan en función de lo físico, de eso no hay duda. Creo que si lo físico es lo único que buscas, si eso es lo único que te va unir a una persona, entonces en algún momento va a pasar alguien que seguramente te va a gustar más que el compañero del momento, y ya está, fue. Siempre va a haber alguien mejor, esa es la trampa en la que se mete el que busca solamente un físico. Y por el lado del que ofrece, si lo único que puede dar es su físico, creo que también, a la larga, pierde. Porque si lo único que te dedicaste a cultivar fue el cuerpo, bueno, para mí, la verdad, no es mucho', dice Hernán, 30 años, técnico en computación.

Es más que obvio que el aspecto, en el mundo de la moda, es esencial. Sólo que en estos últimos años parece también obvio que el aspecto es igual de esencial para muchos hombres que están muy lejos de ser modelos. Son hombres de todas las edades, aunque la franja más amplia es la que va de los 30 a los 40, cuando aparece un deseo de recuperar juventud perdida y con poco conocimiento de la línea que separa querer estar bien con tener que estar muy bien. Siempre. En clases medias y altas, donde la más que variada oferta de productos y servicios para el cuidado del cuerpo encuentran una demanda creciente y voraz. En una ciudad como Buenos Aires, en la que cultivar una imagen externa de forzada belleza parece ser sinónimo de inserción o inclusión, de éxito o fracaso. Y sin ninguna pasarela de por medio.

Mar Martín quiere montar viviendas tuteladas para anoréxicas en Santiago

La concejala de Benestar Social, Mar Martín, quiere potenciar pisos tutelados para que las personas que padecen trastornos alimenticios puedan recuperarse con más facilidad

La edil asegura que esta experiencia ha dado muy buenos resultados en otras ciudades

Compostela cuenta con la única unidad de Desórdenes Alimentarios de toda Galicia, situada en el hospital Psiquiátrico de Conxo, adonde acuden los casos más extremos de toda la comunidad para recibir un tratamiento multidisciplinar. Cuenta con cinco camas que están ocupadas durante todo el año.

Una oferta que a todas luces resulta insuficiente, tal y como ha reiterado en numerosas ocasiones la presidenta de la Asociación de Bulimia e Anorexia de Galicia, María Flora Cajide-Méndez.

No obstante, parece que el panorama podría cambiar en breve, ya que la concejala de Bienestar Social, Mar Martín, aseguró ayer a este rotativo que su departamento quiere potenciar la apertura de pisos tutelados para personas que padecen anorexia y bulimia, y que están recibiendo tratamiento en Conxo, pero no están ingresadas en el centro hospitalario.

Mar Martín indicó que este tipo de iniciativas está dando muy buenos resultados en otras ciudades españolas. "Otras experiencias realizadas en otros puntos del país confirman que, a las personas que padecen este tipo de trastornos, les resulta más sencillo recuperarse fuera de su entorno familiar y con otras personas que se encuentran en su misma situación".

La concejala explicó que es probable que la vivienda funcione como una residencia, ya que este tipo de enfermos necesita un control muy estricto.

Además, según la edil estos pisos permitirían a las enfermas, ya que en su mayoría son mujeres, llevar una vida normal, sin interrumpir sus estudios, en el caso de que sean universitarias.

Martín también señaló que uno de sus objetivos es crear una red de centros de día especializados en diferentes áreas y hacerlo en colabaroción con las asociaciones correspondientes.

Así, anunció que en breve se abrirá un centro de día para enfermos de alzheimer y otro para afectados de esclerosis múltiple. Mar Martín también espera poder utilizar algunos de los centro socioculturales de la capital gallega como centros de día, en los que incluso se puedan dar comidas.

A la espera

A principios de año, el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quinta, anunció la creación de un piso para las familias de enfermos de anorexia y bulimia. Sin embargo, de momento la vivienda no se ha puesto en funcionamiento.

15 agosto 2007

Sobre mi

Sigo viva, más pequeñita eso esí y a por más reducción que voy a ir...

P.D.:tengo problemas técnicos con mi ordenaodr entre otras cosas, espero poder darle vidilla de nuevo a este blog.

Feliz verano a tod@s

Estas son las tendencias en las pasarelas...(2)










Se siguen llevando los huesos...

20 julio 2007

Alimentos consuelo

La tristeza puede fomentar una mala alimentación debido al deseo de tener un breve estado de euforia.

NÚRIA LLAVINA RUBIO
18 de julio de 2007

Cuando uno está triste tiene tendencia a descuidar lo que come. Algo tan conocido, sin embargo, apenas ha sido tomado en consideración por los expertos salvo en guías orientativas, algunas de ellas asociadas a estudios de conducta. Ahora, un estudio de la Universidad de Cornell (Nueva York) insiste en la correlación negativa entre estado de ánimo y alimentos. La investigación reitera que el estado de ánimo y el consumo de alimentos poco saludables son parientes cercanos.

De acuerdo con los resultados de la investigación, cuando nos invaden momentos puntuales de tristeza, estamos deprimidos o con un estado de ánimo bajo, buscamos refugio en algún elemento, factor o situación que ayude a revertir el malestar. En ocasiones, el refugio es la nevera, cuando no la despensa. Y ahí es donde, con demasiada frecuencia, comemos lo que más nos apetece, que no siempre es lo más saludable.

El estudio ha sido dirigido por Nitika Garg (profesor de Marketing en la Universidad de Mississippi), J. Jeffrey Inman (profesor de Marketing y de administración de empresas de la Universidad de Pittsburg) y John S. Dyson (profesor de Marketing y Economía Aplicada de la universidad de Cornell). Los resultados se han publicado en la revista Journal of Marketing

Las palomitas y el estado de ánimo.


La investigación tuvo un diseño peculiar. En una primera fase, se planteó a 38 auxiliares administrativos el visionado de una película divertida, Sweet Home Alabama, y de otra dramática, Love Story. Para rematar la sesión se dio a los espectadores, como aperitivo, palomitas con sal y mantequilla y uvas pasas. Parece ser que los resultados hablan: con Love Story, el consumo de palomitas fue un 36% superior. Por su parte, los espectadores de la película divertida comieron las palomitas mucho más despacio.

Uno de los directores, Wansink, entiende que las personas que se sienten deprimidas o tristes pretenden buscar un consuelo, un estado breve de euforia o placer a través de alimentos apetitosos pero no necesariamente saludables.

En una segunda fase del estudio se intentó corroborar los resultados. Esta vez se usaron golosinas de chocolate mientras los voluntarios leían diversas notas, unas sobre niños y niñas muriendo y otras sobre cuatro viejos amigos que compartían una esplendorosa y agradable tarde. «Cuando alguien está triste necesita buscar una recompensa, y lo más fácil es picar comida sabrosa pero para nada saludable», asevera Garg. En el estudio, los primeros comieron cuatro veces más chocolate que los segundos.

Información nutricional.

Las personas que no manifiestan un bajo estado de ánimo no se ven tan afectadas al leer aspectos negativos sobre ciertos alimentos.

En la última fase del estudio se intentó relacionar el estado de ánimo y la comida con la lectura de información nutricional. Se puso a prueba a otros voluntarios. De nuevo les ofrecieron palomitas, esta vez para recompensarles después de llevar a cabo diferentes tareas, entre las cuales estaba la descripción de aspectos que les hacen sentir felices (o tristes) o la escritura de breves historias sobre tristeza o alegría. A una parte de los voluntarios se les añadía información nutricional sobre las palomitas y a otros no.

En los resultados, los únicos que oscilaron entre el comer mucho y el no comer absolutamente nada fueron las personas que habían manifestado un bajo estado de ánimo durante la actividad. Por el contrario, los voluntarios con un estado de ánimo positivo no variaron la forma de comer. En este caso, el hecho de recibir o no información nutricional sobre las palomitas no afectó el resultado.

Wansik sostiene que un bajo estado de ánimo influye en la alimentación tanto por exceso como por falta y que, en términos generales, a las personas que no lo manifiestan no les afecta tanto leer aspectos negativos sobre ciertos alimentos.

Un pez que se muerde la cola.

Una alimentación desequilibrada puede producir carencias específicas de vitaminas o minerales que se manifiestan mediante síntomas o sensaciones como apatía, desgana, irritabilidad, nerviosismo, cansancio, falta de atención, fallos de memoria, de concentración e incluso depresión.

Si bien el estudio de la Universidad de Cornell reafirma que el estado de ánimo puede afectar a la alimentación, también es cierta la lectura inversa, que la alimentación puede influir en el estado de ánimo. ¿Quién llega primero? Tanto si la tristeza es causa como consecuencia, cuando se adquieren malos hábitos de alimentación se puede crear una situación de dependencia de difícil salida.

Estar desanimado, no comer bien, sentirse físicamente mal, desanimarse aún más. Es un bucle en el que, a pesar de todo, de lo que se trata es de aprender a comer de forma saludable. Los expertos recomiendan no dejarse llevar por la sensación de decaimiento y tristeza. Llevar una vida activa y encontrar nuevos puntos de motivación personal podrían ser una salida para enfrentar situaciones negativas.

El ministro Bernat Soria dispuesto a fomentar la imagen de belleza saludable.

El ministro de Sanidad y Consumo, Bernat Soria, manifestó este jueves su disposición a llegar a acuerdos con las revistas de moda para fomentar la imagen de belleza saludable. Anunció además que cuatro cadenas de distribución han comenzado a exhibir en sus escaparates maniquíes con al menos la talla 38.

CNN+. Soria hizo estas declaraciones en una rueda de prensa celebrada tras la firma de adhesión de la Asociación Textil de Galicia, la Fundación "Centro de Innovación y Tecnología del Textil de Andalucía" y Carrefour al acuerdo para unificar tallas en la que descartó que se vaya a retomar la Ley del Alcohol.

El ministro señaló que Sanidad ha mantenido conversaciones con algunas revistas de moda encaminadas a firmar acuerdos similares.

"No es la única línea", pero sí una en la que "estaría encantado" de trabajar el ministro, quien defendió el establecimiento de sinergias con los consumidores, los creadores y las empresas con el objeto de potenciar la imagen de belleza saludable.

Como tal, Soria definió un concepto "intermedio" entre la mujer de Rubens y la anoréxica, entre "el notable sobrepeso" y la "delgadez extrema".

El ministro subrayó que el Departamento de Sanidad "no prohíbe", sino que promueve conductas y hábitos saludables a través de acuerdos como el suscrito hoy, pero sin "dificultar la creatividad" de un sector como el de la moda que agrupa a 5.000 empresas y factura 7.500 millones de euros.

06 julio 2007

Los trastornos alimentarios alteran la menstruación: estudio

Por Anne Harding

5 de julio de 2007, NUEVA YORK (Reuters Health) - Cualquier tipo de trastorno alimentario puede aumentar la posibilidad de alterar la regularidad menstrual, confirmó un nuevo estudio.

Según los resultados, "cuando la menstruación es irregular, habría que considerar los trastornos alimentarios", dijo a Reuters Health la doctora Cynthia M. Bulik, de la University of North Carolina, en Chapel Hill, autora principal del estudio.

La ausencia del período aumenta el riesgo de osteoporosis, sostuvo Bulik, y hasta podría alterar la fertilidad.

Los criterios diagnósticos vigentes establecen que la anorexia nerviosa es el único trastorno alimentario relacionado con la irregularidad menstrual, mencionó Bulik. Una mujer debe tener ausencia de menstruación por al menos tres meses para recibir un diagnóstico de anorexia nerviosa.

Pero en un sondeo a 1.705 mujeres que participaban de un estudio genético y reunían estrictamente los criterios diagnósticos de trastornos alimentarios, el equipo halló irregularidades menstruales.

Entre estos problemas se destacaban la ausencia prolongada del período, la falta de menstruación durante un mes y períodos reducidos entre las mujeres con algún tipo de trastorno alimentario, incluida la bulimia nerviosa.

Casi el 80 por ciento de las mujeres con anorexia tuvieron amenorrea secundaria, es decir, que comenzaron a menstruar antes de los 16 años y dejaron de hacerlo durante no menos de tres meses seguidos, por lo menos una vez.

El 36 por ciento de las mujeres con bulimia nerviosa tuvo amenorrea secundaria, como el 30,4 por ciento de las participantes del grupo de trastornos alimentarios "sin clasificar".

Los factores más importantes relacionados con la disfunción menstrual incluyeron el índice de masa corporal (IMC), el consumo de calorías y el nivel de ejercicio físico.

Las mujeres con menstruación normal tuvieron los IMC máximos y mínimos más extremos durante su vida, destacaron los autores; pero algunas mujeres con peso normal también mencionaron tener irregularidades menstruales.

Los resultados sugieren que la menstruación "no debería considerarse apenas un criterio informativo para distinguir entre los subtipos de trastornos alimentarios".

Los médicos sólo controlan los trastornos alimentarios en sus pacientes cuando tienen un peso por debajo de lo normal, dijo Bulik.

Pero, según estos resultados, "las irregularidades menstruales deberían ser una bandera roja para que todos los médicos interroguen a sus pacientes sobre los trastornos alimentarios", concluyó la investigadora.

FUENTE: International Journal of Eating Disorders, julio del 2007

"Dietas milagro" para adelgazar: sin fundamento científico y con riesgo para la salud.

Frecuentemente aparecen nuevas dietas de adelgazamiento, difundidas a través de programas de televisión, revistas de moda, alimentación, etc., que tienen en común la promesa de una rápida pérdida de peso sin apenas esfuerzo. Estas “dietas milagro”, frecuentemente, son fruto de la búsqueda de beneficios económicos más que de la promoción de una alimentación sana y equilibrada y son prescritas por personas sin conocimientos científicos ni profesionales en el campo de la nutrición.

En general, estas dietas inducen una restricción de la energía ingerida muy severa, que conduce a deficiencias en vitaminas y minerales, alteraciones del metabolismo y a una monotonía alimentaria que las hace insostenibles en el tiempo y peligrosas para la salud. Se caracterizan, pues, por las escasas calorías que aportan. Ante esta situación cercana al ayuno, el organismo reacciona compensando la falta de energía recibida con un aumento de la destrucción de las proteínas corporales, como fuente alternativa de energía, lo que provoca una pérdida de masa muscular y, por otro lado, la formación de sustancias peligrosas para el organismo cuando la dieta se prolonga en el tiempo.

Sin embargo, quien sigue estas dietas interpreta erróneamente la pérdida de masa muscular y, por tanto, de peso con el éxito del régimen escogido, pues dan resultados espectaculares al subirse a la báscula durante las primeras semanas. Esto se debe a que el tejido muscular es muy rico en agua, con lo que se elimina mucho líquido en la primera fase. En ocasiones este proceso se refuerza con el consumo de diuréticos (fármacos que promueven la excreción de orina), lo que conduce a una aún más llamativa pérdida de peso.

Un problema añadido de estas “dietas milagro” es que favorecen una recuperación muy rápida del peso perdido (efecto “rebote” o “yo-yo”). La tendencia exacerbada a la recuperación del peso se produce porque las situaciones de ayuno ponen en marcha potentes mecanismos nerviosos y hormonales que se oponen a la pérdida de peso: mayor rendimiento del metabolismo corporal, con un mayor ahorro energético e incremento del apetito. Estos mecanismos conducen a una rápida recuperación del peso perdido en cuanto se vuelve a comer de la forma habitual. Ese peso recuperado se debe predominantemente a la formación de tejido graso, que es, precisamente, el que origina problemas de salud y el que deberíamos reducir con la dieta (como se demostró ya en los experimentos realizados por el gran científico español de la nutrición Profesor Grande Covián hace 30 años).

Los signos que permiten reconocer una “dieta milagro” son.

- La promesa de pérdida de peso rápida: más de 5 kg por mes.
- Se puede llevar sin esfuerzo.
- Anunciar que son completamente seguras, sin riesgos para la salud.

En resumen, las dietas muy restrictivas, muy bajas en calorías, aunque consiguen que el peso disminuya a corto plazo, constituyen un riesgo inaceptable para la salud ya que pueden:

1.Provocar deficiencias de proteínas, vitaminas y minerales por la falta de consumo con los alimentos.
2. Producir efectos psicológicos negativos.
3. Desencadenan, incluso, trastornos del comportamiento alimentario (anorexia y bulimia), a veces de mayor gravedad que el exceso de peso que se pretendía corregir.
4. Favorecer el efecto “rebote” o “yo-yo”.
5. Al abandonar estas dietas, las personas que siguen estas dietas no han aprendido a comer saludablemente y vuelven a las costumbres que les hicieron engordar.

Clasificación y descripción de las principales “dietas milagro”.


De forma general, las llamadas “dietas milagro” se pueden clasificar en tres grandes grupos:

* Dietas hipocalóricas desequilibradas: en estas se incluyen la dieta de la Clínica Mayo, Dieta “toma la mitad”, Dieta Gourmet, Dieta Cero. Estas dietas provocan un efecto rebote, caracterizado por una rápida ganancia de peso, que se traduce en un aumento de masa grasa y pérdida de masa muscular. Esto obedece a que el metabolismo se adapta a la disminución drástica de la ingestión de energía mediante una disminución del gasto energético. Estos regímenes suelen ser monótonos, además de presentar numerosas deficiencias en nutrientes, sobre todo si se prolongan por largos períodos de tiempo.

* Dietas disociativas: Dieta de Hay o Disociada, Régimen de Shelton, Dieta Hollywood, Dieta de Montignac, Antidieta, etc. Se basan en el fundamento de que los alimentos no contribuyen al aumento de peso por sí mismos, sino al consumirse según determinadas combinaciones. No limitan la ingestión de alimentos energéticos sino que pretenden impedir su aprovechamiento como fuente de energía con la disociación. Esta teoría carece de fundamento científico y los resultados obtenidos sólo obedecen a un menor consumo de energía. Además, este tipo de consumo es casi imposible porque no existen alimentos que solamente contengan proteínas o hidratos de carbono.

* Dietas excluyentes: se basan en eliminar de la dieta algún nutriente. Estas dietas pueden ser:

i) ricas en hidratos de carbono y sin lípidos y proteínas, como la Dieta Dr. Prittikin y la Dieta del Dr. Haas;
ii) ricas en proteínas y sin hidratos de carbono: Dieta de Scardale, Dieta de los Astronautas, Dieta de Hollywood y la Dieta de la Proteína Líquida. Producen una sobrecarga renal y hepática muy importante;
iii) ricas en grasa: Dieta de Atkins, Dieta de Lutz. Se conocen como dietas cetogénicas. Pueden ser muy peligrosas para la salud, produciendo graves alteraciones en el metabolismo.

Más info: http://www.aesan.msc.es/aesa/web/AESA.jsp

02 julio 2007

Sanidad incrementará controles sobre publicidad de dietas milagro.

El Ministerio de Sanidad incrementará los controles sobre la publicidad de las dietas milagro que 'a veces rayan en la publicidad engañosa', anunció hoy la titular del departamento, Elena Salgado.

Estos regímenes pueden ser una 'puerta de entrada' a la anorexia y la bulimia cuando los siguen adolescentes, advirtió la ministra en una rueda de prensa de presentación de una web del Ministerio y de la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) en la que informará sobre los peligros de este tipo de dietas.

Salgado reconoció que el problema en la publicidad reside en que durante el primer mes sí consiguen rebajar kilos.

Además se desarrollan de forma indirecta citando personajes famosos que supuestamente las han seguido, pero no cuentan con una entidad corporativa que las promocione, señaló.

La ministra advirtió de que si en una de ellas se incluye una sustancia o producto no permitidos el Ministerio actuará al igual que si alegan propiedades saludables o nutricionales de las que carecen en cumplimiento del Reglamento europeo sobre esta materia que entra hoy en vigor.

En este sentido, señaló que el Sanidad ha optado por la prevención de la salud mediante 'medidas en positivo'.

Entre ellas, incluyó las páginas en la web del Ministerio y de la AESAN elaboradas en colaboración con las sociedades científicas especializadas en nutrición donde desde hoy se pueden consultar los riesgos de las dietas milagro.

Además se distribuirán folletos con información sobre alimentación saludable y nutrición a través de las oficinas de farmacia.

El objetivo de la iniciativa es trasladar a la sociedad el mensaje de que el tratamiento para perder peso debe ser personalizado y bajo control médico.

'Ninguna dieta reduce kilos en tiempo récord sin poner en riesgo la salud', señalo Salgado, quien subrayó que con las dietas rápidas se pierde agua y en cuanto se dejan el efecto rebote hace que se recupere lo que se ha perdido, pero en forma de grasa.

Entre los peligros la ministra señaló que pueden provocar deficiencias de proteínas, vitaminas y minerales, desencadenar trastornos como la anorexia o la bulimia y producir efectos psicológicos negativos.

En el mismo sentido se manifestó el presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), Basilio Moreno, quien afirmó que es la primera vez que el Ministerio de Sanidad aborda el tema.

A su juicio, la gente quiere 'atajos' para perder peso y recurre a estas dietas, entre las que citó la dieta de la clínica Mayo, la Montignac, la Atkins o la de la zona, algunas de las cuales pueden provocar hipertiroidismo o trombosis mesentéricas.

'Todas son peligrosas y algunas han sido mortales' como la de la proteína líquida que se popularizó en Estados Unidos en los años 70, aseveró.

Para reconocer una dieta milagro Sanidad identifica tres signos: la promesa de perder más de 5 kilos al mes, la afirmación de que se pueden llevar sin esfuerzo y el anuncio de que son completamente seguras y sin riesgos para la salud.

10 junio 2007

Bitácora

Algún agente extraño ha entrado en mi cuerpo y estoy algo enferma y desganada, salvo las ganas de comer, claro.

Volveré.

Lipofobia, uno de los criterios diagnósticos de la anorexia y bulimia.

La especialista universitaria subraya padecimientos por obesidad.

Explica Gilda Gómez Peresmitré, de la Facultad de Psicología de la UNAM, que se trata de un temor exagerado, enfermizo e irracional a subir de peso, que lleva a las personas a evitar su propio cuerpo, a no verse en el espejo y a autovalorarse negativamente.

México, DF.– El miedo exagerado, enfermizo e irracional a engordar, mejor conocido como lipofobia, es uno de los criterios diagnósticos de la anorexia y la bulimia, y se manifiesta como insatisfacción y distorsión de la imagen corporal, afirmó Gilda Gómez Peresmitré, de la Facultad de Psicología de la UNAM.

La experta explicó que tal incomodidad consiste en decir “no estoy a gusto, no me gusta la forma o el tamaño de mi cuerpo”, sin importar que sea delgada, y la deformación a percibirse y sentirse gorda aunque, incluso, esté por debajo de su peso saludable.

Ese temor lleva a las personas a evitar su propia corporeidad, a no verse en el espejo y a autovalorarse negativamente con adjetivos como “estoy fea, cerda” y otros términos que hacen al organismo producir estímulos de ansiedad, detalló.

La experta señaló que la anorexia y bulimia presentan una serie de síntomas para consolidarse, además de factores de riesgo que pueden llevar a su desarrollo.

Entre ellos se encuentra la preocupación por el peso y la realización de dietas.

Según el estudio Factores de riesgo en trastornos de la conducta alimentaria, realizado por Gómez Peresmitré y su equipo de trabajo, existen niños desde los 6 años insatisfechos con su imagen corporal, a quienes no les gusta su cuerpo y con una actitud negativa hacia la obesidad.

En una muestra de 8 mil 673 hombres y mujeres de tres diferentes grupos: de 6 a 9 años, de 10 a 12 y de 13 a 19 años, de escuelas públicas y privadas de la Ciudad de México y zona conurbada, se observa que 40.4 por ciento de las escolares más jóvenes, el 65 de las púberes y el 76.6 de las adolescentes, eligieron una figura delgada y muy delgada como ideal.

La investigación refiere que el factor de riesgo “preocupación por el peso” es uno de los más frecuentes como antecedente de trastornos de conducta alimentaria.

Más del 60 por ciento de los niños y niñas más pequeños ya se preocupan por este indicador.

Se halló que el seguimiento de dietas para su control es uno de los elementos de mayor riesgo.

Entre las niñas, en cada uno de los tres grupos de edad, la mitad dijo privarse de comida para controlar su talla.

Además, se señala que la gran mayoría de los investigados (63 por ciento) presentan una actitud negativa hacia la obesidad, calificando a una niña gorda como “fea, tonta, prieta y asquerosa”.

El resto le da atributos positivos (“simpática, alegre”) y respuestas neutrales (“grande, pesada”).

Estos resultados muestran que el término “obesidad” es altamente peyorativo.

Además, se produce el “efecto del halo”, es decir, aquel en donde se generaliza una característica positiva o negativa a todas las actividades o conductas de una persona.

Por ejemplo, se suele pensar que una chica rubia es “tonta, hueca y superficial”.

La lipofobia se inicia, generalmente, con una autovaloración negativa del cuerpo, influidos por los criterios impuestos, llamados de la “delgadez”, que en su expresión patológica es, literalmente, la de piel pegada al hueso, y en su expresión normal, un culto a la apariencia física en donde se olvidan otras cualidades y valores para enfocarse al “cómo nos vemos”, añadió la experta.

Dicha ansiedad tiende a agudizarse durante el desarrollo de la anorexia.

Por mecanismos de asociación los alimentos relacionados con el aumento de peso o a los que se les atribuye la capacidad de engordar adquieren “propiedades” aversivas.

Cuando se agrava el padecimiento, la respuesta se generaliza a cualquier comestible y aún a lugares físicos y a las personas con quienes se suele departir, especificó.

Así sucede que se inician e incrementan conductas de “evitación”, es decir, se rehuye el consumo de comida, y se hacen dietas o ayunos extremos.

En el corto plazo, explicó Gilda Gómez Perezmitré, esa conducta reduce el apetito, se pierde peso y se mantiene un tono vital alto, lo que refuerza el sentimiento de autocontrol.

No obstante, en el largo plazo, cuando la falta de ingesta se prolonga, se reduce el ritmo metabólico basal y se detiene la pérdida de peso –a menos que disminuya más la ingesta–, y se incrementa la probabilidad de ganar peso y ansiedad.

Es por ello que en la anorexia, el paciente no puede escapar de la situación aversiva, ni siquiera cuando ya tiene una talla baja.

Siempre estará presente la ansiedad que conlleva el riesgo de engordar.

Si no se detiene ese círculo vicioso, inexorablemente el deterioro físico y mental será cada vez más grave y dará lugar a otras enfermedades, e incluso, a la muerte, finalizó.

milenio.com