02 diciembre 2006

La vida urbana está ligada a mayores tasas de bulimia

Vivir en grandes ciudades eleva el riesgo de sufrir el desorden alimenticio llamado bulimia pero no la anorexia nerviosa, dijeron este viernes psicólogos holandeses.

Los expertos hallaron que las mujeres de las ciudades son cinco veces más propensas a padecer la enfermedad "de atracón y purga" que aquellas que viven en pueblos y aldeas, aunque no encontraron diferencias en cuanto a las tasas de anorexia.
A pesar de que la investigación fue realizada en Holanda, Gabriella van Son, del Centro de Desórdenes Alimenticios de Leidschendam, cree que los resultados son relevantes para otros países desarrollados."La bulimia, que está muy relacionada con la anorexia nerviosa, es más común en las grandes ciudades cuando se la compara con las tasas de las zonas rurales", dijo Van Son durante una entrevista.

"El número de pacientes recientemente diagnosticados con bulimia es alrededor de cinco veces mayor en las ciudades", agregó la experta.
La bulimia y la anorexia afectan principalmente a las niñas y mujeres. Ambas condiciones están ligadas a un deseo obsesivo de ser delgadas.Sin embargo, mientras que las anoréxicas comen muy poco, las bulímicas ingieren alimentos hasta hartarse y luego se provocan vómitos o utilizan laxantes y diuréticos para eliminar la comida de sus organismos.

La anorexia generalmente comienza durante la adolescencia y la bulimia, que afecta a alrededor del 1 por ciento de las mujeres, puede ocurrir en el mismo momento o a mayor edad.Ambos desórdenes alimenticios pueden tratarse con terapia conductual y asesoramiento.

"Además, la bulimia es más secreta que la anorexia debido a que las personas sienten vergüenza de su conducta. Por lo tanto, intentan evitar contarle a otra gente sobre ella", expresó Van Son.La especialista y sus colegas, que informaron sus hallazgos en British Journal of Psychiatry, indicaron que desconocen por qué existe una diferencia en la incidencia de la bulimia entre las mujeres de la ciudad y las de áreas rurales. "El motivo de la asociación es especulativo", manifestó la directora de la investigación.

El equipo sugirió que podría estar ligado al anonimato en las ciudades, donde sería más fácil para una mujer ocultar su bulimia y emplear laxantes que en el caso de vivir en un pequeño pueblo.

Las mujeres tendrían además síntomas que no se detectan hasta que crecen o se mudan a regiones urbanas para continuar sus estudios.Los resultados del estudio se basan en una investigación de casos de bulimia y anorexia recientemente diagnosticados entre 1985-1989 y 1995-1999.La tasa de bulimia era 2,5 veces mayor en las zonas urbanas que en los lugares menos poblados, y cinco veces superior en las grandes ciudades.

Van Son consideró que sus hallazgos zanjan un camino prometedor para futuras investigaciones sobre las causas de la bulimia y la anorexia.


Cadena Global/Reuters