06 junio 2007

Ortorexia, la comida sana obsesiona cada vez a más personas.

BEATRIZ CASTRILLO. 06.06.2007

El 5% de las consultas por trastornos de la alimentación ya son por ortorexia.
Este nuevo fenómeno está en auge desde hace cinco años.
Les encanta pasar horas y horas en el supermercado leyendo la información nutricional de los productos, calibran sus dietas al milímetro y sólo comen alimentos ecológicos y sin aditivos. Son los ortoréxicos, personas obsesionadas con la comida sana.

Puede desembocar en anorexia, bulimia, desnutrición o trastornos sociales La ortorexia, al contrario de lo que pueda parecer, está muy lejos de una dieta saludable y puede desembocar en problemas más graves como anorexia, bulimia, desnutrición y trastornos sociales.

Hace unos años que esta palabra empezó a sonar en las consultas psiquiátricas. «Es un fenómeno reciente, de hace unos cinco o siete años», explica María del Carmen González, coordinadora de la asociación contra la anorexia Adaner.

Este problema ya representa el 5% de los trastornos de la alimentación, según estimaciones de Adaner, y la cifra va en aumento. «Cada vez recibimos más llamadas de familiares de personas obcecadas con la comida sana», continúa González.

Sin datos oficiales

Aunque la Consejería de Sanidad no dispone aún de datos oficiales, debido a la novedad del fenómeno, unas 1.250 personas en Madrid de los 25.000 enfermos relacionados con conductas de la alimentación, son ortoréxicos, según la asociación Adaner. Pese a que todavía es incipiente, «hay mucha gente que puede caer». En torno a un 37% de los madrileños están en riesgo de volverse ortoréxicos.

Cuanto más «severa» es la obsesión y más se excluyen alimentos básicos, la ortorexia puede derivar en desnutrición, anemia, pérdida de masa ósea, carencias de vitaminas.

Además del evidente desgaste físico, los afectados suelen aislarse: «rechazan ir a bodas, cenas o cualquier acto social por miedo a comer algo no saludable», asegura la psicóloga clínica Elena Borges.

Escrupulosos con la comida

Las personas que sufren ortorexia rechazan la carne, las grasas y los alimentos cultivados con pesticidas. También se preocupan por la preparación y los recipientes en que se cocinan.

Les importa tanto la calidad de los alimentos que se olvidan casi completamente del placer de consumirlos. Una vez que se detecta la ortorexia hay que reestructurar los hábitos alimentarios para que su dieta sea completa, equilibrada y bien distribuida.

1 comentario:

Alicia Martín dijo...

Hola, soy una alumna de 4º curso de Periodismo y me estoy dedicando ahora a investigar la ortorexia, un mal poco conocido, que me gustaría que llegara a todo el mundo para que la sociedad pudiera tomar conciencia del problema.
Estoy buscando documentación a través de distintas fuentes y he leído tu texto sobre el tema. Me parece muy interesante lo que cuentas y me gustaría mantener contacto contigo via e-mail para que me dés tus impresiones sobre el tema. Mi email es aluka86@hotmail.com. Muchas gracias. Un saludo.